Villa Clara saldrá hoy a ganar en pelota

Norland Rosendo González

Al equipo de béisbol de Villa Clara, en el centro de Cuba, no le queda otra opción que ganarle hoy a la Habana, para mantener vivas sus esperanzas de coronarse campeón en la Serie Nacional de ese deporte, la mayor pasión de los cubanos.

Tras un fin de semana aciago, que les deparó dos reveses como visitantes, ahora el escenario es el estadio Augusto César Sandino, de Santa Clara, considerado como la ciudad naranja por la cantidad de atuendos de ese color, identificativo de la novena local, que portan los aficionados en las gradas.

Los dos primeros compromisos fueron muy mal jugados, tanto que es preferible olvidarlos. La mecánica de juego de los villaclareños, tan elogiada por su precisión, se fue abajo. Errores que semejaban horrores. Y para colmo, en los lances cerrados, ni una de las decisiones de los árbitros nos benefició. Es más, cuando era quieto, cantaban out, y viceversa. Los strike de nuestros lanzadores eran vistos como bolas.

Nada, que cuando el mal es de perder, hasta los árbitros te hunden.

Pero hoy tengo la convicción de que será otro elenco en el terreno. Agresivo, ingenioso, eficiente en la conversión de hombres embasados en carreras. Certero a la defensa, hábil, como en los play off contra Santiago de Cuba y Ciego de Ávila.

No defraudarán a los miles de fanáticos que corearán desde las gradas: Villa Clara, campeón. Pa´ Santa Claraaaaaaaaaaa, y harán la ola de un extremo a otro del parque beisbolero.

Acaban de anunciar por la televisión local que desde Santiago de Cuba llegó la famosa conga que tanto suena y pone a gozar a todo el mundo. Este play off es una fiesta.

Yo no podré estar en el Sandino, la presión arterial no me acompaña en esos juegos, y frente al televisor, me como las uñas, pongo mi nariz más roja que la guayaba madura y vocifero palabrotas, que en otras circunstancias nadie me ha oído pronunciar.

Es la pasión de la pelota, de los que queremos ver otra vez a Villa Clara en lo más alto del podio de premiaciones, en la cumbre de la Serie Nacional. Un sueño postergado hace 15 años.